Socorristas del Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional y de la Defensa Civil rescataron este domingo el cadáver del tercer jovencito que junto a otros dos se ahogaron el sábado cuando se bañaban próximo al obelisco hembra en el mar Caribe, del Malecón de Santo Domingo.
Se trata de Orbis Mora Noboa, quién era el mayor del grupo. Tenía 15 años Su cuerpo fue rescatado alrededor de la 1:00 de la tarde.
Los cadáveres de Nicolás Gil de los Santos y Christopher Feliz Hernández, fueron rescatados el sábado en la tarde, poco después de ahogarse.
Los padres de los menores llorando desconsoladamente dijeron que los menores salieron escondidos y sin sus permisos.
Fiordaliza Méndez, madre de Christopher Hernández Méndez, llora desconsoladamente la muerte de su único hijo varón de 12 años.
Christopher, que estaba en cuarto de la primaria era el segundo y más pequeño de sus vástagos, fue catalogado por su madre como un niño obediente, por lo que asegura que el menor salió escondido.
En el caso de Francia de los Santos Contreras, madre de Nicolás Gil Contreras también de 12 años y que era el tercero de una familia de cinco y el más pequeño de los varones, dice que también salió sin su consentimiento.
Su padre, Nicolás Gil, quién también consideró que su cría era buen muchacho, sospechaba que él hacía travesuras propias de la edad, lo que lo llevó a su destino final.
Otros dos niños que también se bañaron junto a los tres adolescentes ahogados salvaron la vida milagrosamente. Confesaron que habían sido sacados de otra parte del mar Caribe donde pretendían nadar.
Se trata de Orbis Mora Noboa, quién era el mayor del grupo. Tenía 15 años Su cuerpo fue rescatado alrededor de la 1:00 de la tarde.
Los cadáveres de Nicolás Gil de los Santos y Christopher Feliz Hernández, fueron rescatados el sábado en la tarde, poco después de ahogarse.
Los padres de los menores llorando desconsoladamente dijeron que los menores salieron escondidos y sin sus permisos.
Fiordaliza Méndez, madre de Christopher Hernández Méndez, llora desconsoladamente la muerte de su único hijo varón de 12 años.
Christopher, que estaba en cuarto de la primaria era el segundo y más pequeño de sus vástagos, fue catalogado por su madre como un niño obediente, por lo que asegura que el menor salió escondido.
En el caso de Francia de los Santos Contreras, madre de Nicolás Gil Contreras también de 12 años y que era el tercero de una familia de cinco y el más pequeño de los varones, dice que también salió sin su consentimiento.
Su padre, Nicolás Gil, quién también consideró que su cría era buen muchacho, sospechaba que él hacía travesuras propias de la edad, lo que lo llevó a su destino final.
Otros dos niños que también se bañaron junto a los tres adolescentes ahogados salvaron la vida milagrosamente. Confesaron que habían sido sacados de otra parte del mar Caribe donde pretendían nadar.
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